Más perdida que la una...

Había conseguido llegar hasta el centro, algo tímida sin saber muy bien si iba por buen camino o si, como casi siempre, había metido la pata y tenía que morirse de vergüenza... Aunque había preguntado en informaciones podría equivocarse de sala o puerta, siempre siempre tenía que ocurrirla algo de esa variedad.
*Toc-toc*
Llamaron a la puerta, según la habían indicado era el cuarto de la directora. Esperó que la contestaran no sin antes decir:
-¿Se puede...?-

La puerta se abrió y tras ella apareció una joven de estatura media y pelo castaño, de ojos marrones verdosos y tez clara; su mirada era de duda y timidez. Cuando hubo pasado, cerró tras de sí sin hacer mucho ruido y no molestar.
-Muy buenos días. ¿Es la directora?-

Se acercó unos pocos pasos más, algo más relajada por no haberse equivocado, pero seguía nerviosa... ¡siempre la pasaba igual con todo!
-Bueno, venía a inscribirme como alumna del centro...-
Suspiró.
-Mi nombre es Kokoro Etahyo, y tengo 17 años.-
Estaba tan nerviosa que lo dijo todo de un tirón, sin saber si había sido demasiado rápida y decidida o qué sino... Esperando la respuesta.

-Ah... muchísimas gracias... hmm...-
Decía mientras le entregaba encima de la mesa su DNI para que le tomara sus datos si así lo requería y cogía las hojas para rellenar las incsripciones.
-Espero no dar muchas molestias... suelo ser bastante torpe u olvidadiza...-
Se palpó el vestido... como si buscara algo.
-Hmm... ¿tiene un boli?-

-Imagino que si... es mi inscripción, jajaja...-
Tras reír como una estúpida, porque era así como se sentía, tomó el bolígrafo con sus dedos de la mano diestra y sentándose en una silla comenzó a rellenar con sumo cuidado y letra buena los papeles. Tras unos minutos ya hubo acabado, cerró el bolígrafo con su tapa y se quedó revisando todo con detenimiento por si hubiese algún fallo o le faltase algo.
-Hmm... hmm...-
Finalmente creyó que todos los campos estaban completos. Sonrió y alzando la vista a la Directora le entregó los papeles.
-Creo que ya están... Si falta algo dímelo...-
Estaba un poco sonrojada, su timidez era visible en ciertos momentos y eso lo odiaba en rotundo.

-Antes te lo dije, pero bueno... tengo 17 años...-
Miró su DNI en la mesa he hizo un gesto por si ya podía cogerlo para guardarlo de nuevo, era olvidadiza y no quería dejarse cosas tan importantes como esa por ahí...
-¿puedo?-
preguntó aun asi.