Hogar de Alone Darkness

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***Mansión de Alone Darkness***

Esta es una mansión Lujosa situada cerca a la playa,la cual consta de lo siguiente:

A la entrada de esta majestuosa masión lo primero que nos encontramos es con una formidable pista de tenis a la izquierda, a la derecha la entrada a la segunda planta de la casa, donde esta situado el salón principal, el bar, el home cinema con 9 amplísimos sofas donde podrán disfrutar de las últimas películas, además, el comedor y dos habitaciones dobles con sus respectivos cuartos de baño y salón, todo en suite. Ademas, una espectacular terraza rodea todas las habitaciones dando acceso desde la terraza a cualquier punto de esta planta. La terraza goza de unas impresionantes vistas al mar y al jardín de la casa, es uno de los lugares preferidos por los huespedes, por su magnifica situación a las zonas comunes de la casa.

Un hall de entrada construido con un mural de mármoles de froma circular y unas escaleras que emvuelven el mismo dan acceso a la tercera planta, donde se encuentra el dormitorio principal con vestidor, baño y una oficina en suite. Por supuesto, desde esta habitación ubicada en el punto más alto y céntrico de la casa, tenemos acceso a una terraza independiente con unas vistas al Mar. Hay que destacar que no hace falta utilizar las escaleras para nada porque siempre se puede utilizar el ascensor.

Bajamos a la planta baja y nos encontramos en el centro de la planta con una maravillosa piscina cubierta, un jacuzzi, un sauna y un impresionante salón con otro bar .

Al igual que un garage con lugar para 10 autos de origen deportivo.

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En este lugar vive Alone junto a su Hermana y sus Sirvientes aunque en la actualidad el convive solo junto a sus sirvientes ya que aún está en búsqueda de su hermana quien le hará recordar su pasado.

Para entrar se requiere tener permiso de su Dueño o invitación.

Tras Dejar a aquella Joven Hechicera de nombre Blanc,aquel Joven Demonio se encaminó en busca de un Hospedaje junto a su mascota quien habia resultado ser su Guardián,una criatura que le cuidaría de aquellos que se atrevieran a desafiarle.

Un obsequio de su antiguo padre y el Guardían de la entrada al Inframundo,tras vagar por aquella ciudad y de aquella prueba impuesta a Blanc,un lugar habia atraido su atención,una mansión hubicada en las cercanías de una playa de arenas blanquecinas.

Aquel no era su Mundo,ni esa casa lujosa su hogar,aunque de algo se podía estar seguro lo que el quería lo tomaba sin mediar palabras.

Aquella brutal oscuridad se centró en los Dueños de aquella mansión,los cuales se convirtieron en su blanco,un mero obstáculo en su camino,uno que debía quitarse.

Sin mediar palabra alguna aquel ser de orígen demoníaco había decidido quitarles lo más preciado en el mundo,la Vida,tal como hacía con aquello que le estorbaba,solo le era una diversión.

Este buscaba divertirse y disfrutar de aquel sufrimiento antes de que el Fin se cirniera sobre estos,usando aquella oscuridad habia logrado infiltrarse en aquel hogar y solo le bastó un movimiento para poner fin a aquellos que vivían allí.

Los adultos cayeron primero en busca de proteger a sus niños,aunque su muerte se convirtió en lo que le parecía una hermosa obra,aquellos cuerpos inertes desangrados frente a sus piés y aquellos gritos de esos niños ante el espectáculo le hacian sonreir de forma fría.

-Este lugar es hermoso pero ahora su decoración lo es más,no es el color más bello que hallan visto,tanto como los ojos de aquella joven y como no puedo verles sufrir ustedes se unirán a ellos,no creen que soy bondadoso,solo les doy una mejor Vida.

Este entonces usó la sangre de aquellos sujetos para pintar en el aire a aquellos chicos.

-Ahora mueran

Estos entonces se fueron debilitando lentamente hasta que al final cedieron en compañía de sus padres.

Este sonrió mientras observaba a aquella mascota que parecía sonreirle satisfecho mientras se encaminaba hacia aquellos cuerpos y terminaba el trabajo.

Aquel lugar ahora sería su nuevo hogar y su nueva fortaleza,al igual que su padre aquellos seres le serían útiles como sus sirvientes,mientras el controlara a aquellos espectros.

Este se encaminó hacia el dormitorio principal dispuesto a tomar un baño.

-Encargate de cuidar el lugar algo me dice que seguramente esa joven volverá,ese brillo en sus ojos demuestra que hay algo de maldad en ella.

Aquella bestia entonces tomó la forma de una Mujer con largas alas y afiladas garras.

-Así será mi amo-Dijo mientras se ponía de rodillas frente a este.

Este se habia encaminado hacia el dormitorio principal,esta ves habia decidido tomar una ducha y tal ves un merecido descanso,habia usado aquel ascensor aunque podía haber usado sus poderes,pero el haber acabado con aquellos sujetos le habia dejado agotado al igual que aquel enfrentamiento.

Caminó rumbo al ascensor cuando oyó la vos de aquellas personas que mató,carcomían su conciencia,este sonrió ante aquellos comentarios.

-Dejenme solo molestos humanos incopetentes,acaso no les gusta su nuevo mundo.

Este alzó su oscuridad nuevamente inundando aquel ascensor y haciendo que vibre y sonrió sarcásticamente.

-No pueden dañarme,no a alguien que controla la oscuridad como la palma de su mano,se atreven a levantar sus manos contra el Príncipe de los Demonios.

Este salió de aquel ascensor y se encaminó hacia la ducha,tras quitarse aquellos ropajes oscuros que llevaba y dejando caer aquel pelo que le llegaba hasta por debajo de la cintura y se adentró en el agua caliente.

Aquel vapor podría hervir a un humano pero el no lo era,recordó aquel amuleto que su hermana le habia otorgado y una vos que le recordaba a ella.

Vió como una figura borrosa se aparecía frente a el,la figura de una mujer hermosa,con una vos dulce aunque con un aura de maldad detrás.

-Cuanto tiempo hermano mío es hora de que tomes el lugar que por derecho te pertenece,aunque parece que algo te aqueja,has encontrado a alguien para unírsenos.

Aquella mujer se acercó a este y le sujetó como si le abrazara.

-Tu belleza jamás ha cambiado,dejame guiarte,acaso sientes algo por otra mujer.

Luego le besó en los labios y este sonrió fríamente.

-Y tu sigues siendo la misma de siempre,pues si he encontrado a alguien y creo que pronto se nos unirá,ella vendrá o le buscaré.

Entonces esta sonrió Fríamente.

-Bien pero no dejaré que dañe a alguien tan preciado para mí.

Luego aquella mujer desapareció en aquel vapor y este salió de aquella ducha para cambiarse nuevamente y encaminarse hacia aquella cama dispuesto a descansar finalmente.

Se había perdido al intentar regresar hacia la ciudad desde el cementerio. Había parado en unos viejos suburbios mientras observaba el lugar poco habitual y desconocido. Se detenía a mitad de camino, observando las casas de los alrededores y luego detenía su vista en la mansión que estaba próximo a su posición.

-Vaya lugar extraño para vivir- Siguió caminando, acercándose a la mansión que parecía ser habitada. Una extraña y fría sensación recorrió su cuerpo mientras un fuerte olor a muerte le hizo perder un poco sus sentidos, mareándose.

-Qué demonios....? -Se detuvo y observó fijamente la mansión, algo en ella le daba mal indicio, incluso algo de temor siendo extraño en ella. Avanzó sin cuidado alguno más hacia el territorio "ajeno"Parándose frente a gran portal que daba entrada al lugar.

-Será mejor que no haga nada- Murmuró para si para luego girarse, quedándose algo pensativa

Aquel perro habia salido de la mansión como si hubiera persibido una presencia en los alrededores mientras sus gruñidos se hacian sentir cada ves más fuertes como si fueran los de un lobo al acecho,aquello hizo que el Joven despertara y se pusiera de pié viendo como aquella Mujer de alas y garras salía a atacar algo que parecía estar cerca.


-Detente ahi intrusa si das un paso más tendré que acabarte,mi amo no quiere visitas.


Aquel joven sonrió Fríamente mientras oía la vos de su hermana y su risa maléfica.

-Jaja parece que no has perdido tu toque querido hermano,ahi la tienes frente a tu puerta,puedo jugar con ella,solo espero tus ordenes.

Este caminó hacia la terraza que daba a la habitación y salió de esta para observar el jardín que se extendía al frente.

-Blanc ella está aquí pues no jugarás con ella,es nuestra invitada de honor,así que démosle una grata bienvenida.

Este entonces usó aquella oscuridad haciendo un campo oscuro a su alrededor,el cual le cubrió por completo haciendo que levitara en el aire y sonrió fríamente.

-Iré en persona a recibirle.

Aquella mujer sonrió sarcásticamente mientras veía como aquella oscuridad se incrementaba a su paso.

Aquella mujer de aspecto como el de un ave estaba frente a Blanc impidíendole moverse,hasta que vió como aquel perro bestia se acercaba sediento de sangre humana con un aspecto más grotesco que antes.

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Hasta que tubo que hacerse a un lado para evitar que este le atacase,aunque este miraba a Blanc con aquellos ojos rojos y mostrándole los dientes como si fuera a lanzarse contra esta,estaba a punto de hacerlo cuando oyó una vos que le paralizó por completo.

-Blanc te esperaba,veo que has conocido a mis sirvientes,dejame darte la Bienvenida a mi nuevo Hogar.

Aquel Joven apareció envuelto en una esfera oscura la cual irradiaba un aura de muerte y oscuridad levitando sobre ambos hasta que finalmente se posó en aquel jardín detrás de aquella bestia con una sonrisa cálida viendo como aquella mujer se ponía cerca de este y se arrodillaba como si le saludase.

-Señor Alone no sabia que era su invitada le ruego me disculpe,solo buscaba protegerle.

Este miró a la mujer de aspecto bestia y sonrió.

-Retírate y dejanos solos.

Esta se puso de pié y se retiró del lugar dejando a ambos junto a aquel perro bestia,mientras este caminaba hacia aquella criatura para acariciarla.

Tenía pensando en alejarse por completo de aquella mansión pero algo se lo impidió en ese instante. Escuchó una voz desconocida, pero aquel tono hizo que su piel se erizara por completo, sabía que algo bueno no se encontraba en aquel lugar y más al notar aquella mujer extraña que poseía alas. Aquel perro extraño, el cual parecía más un demonio, le había aterrado de cierta forma, se sentía entre la espada y la pared.

Sabía que si hacía algún movimiento brusco podía terminar mal por eso mantuvo la calma en todo momento, analizando la situación en la cual se encontraba, no era nada fácil. –¿Quiénes son ustedes? –Murmuró con cierta frialdad en su voz mientras observaba a la mujer alada, queriendo no girarse a mirar el endemoniado perro. Esperaba una respuesta rápida, pero lo único que obtuvo fue una especie de advertencia. En un momento llegó a girarse al escuchar cierta voz familiar, pensó que se sorprendería al verlo, pero la verdad no fue así.

Algo en su interior le había dicho que aquel olor a muerte y toda aquella aura tétrica de la mansión tenía que ser obra de aquel joven de oscuros cabellos. Le miraba desafiante mientras observaba los hechos que pasaban y como él despedía del lugar a aquella mujer, quedando sólo el endemoniado animal.

-¿Por qué será que no me sorprende que este lugar le pertenezca? – Su tono se mantuvo seco y frío mientras le observaba desafiante. No sabía que pasaba por la cabeza de aquel joven, pero tampoco quería averiguarlo ya que presentía que no se trataba de algo bueno.

Aquella mujer estaba a punto de responder aquella pregunta cuando se paró en seco para ver a su señor que le hablaba y le pedía que les dejara solos,miró a la joven con algo de recelos y luego a aquel joven y acató la orden sin decir palabra alguna,tal ves por temor a ser castigada.

Esta se marchó del lugar por donde había venido,dejandolos solos a ambos y a aquella bestia endemoniada.

Este oyó a Blanc y sonrió fríamente.

-Irónico creí que temerías al acercarte aquí,o al menos no lo demuestras y realmente lo haces,espero te agrade la decoración,no tengo muchos invitados últimamente,además sus antiguos dueños sufrieron un pequeño accidente.

Este sonrió sarcásticamente mientras acariciaba a aquella bestia como si fuera un perrito faldero.

-Veo que has conocido a mi pequeña mascota,se encarga de evitar las visitas molestas,aunque tu eres mi invitada de honor.

Este caminó hacia la joven y se detubo frente a esta.

-Tal ves el Destino nos quiera unir y por eso estás aqui ahora,me pregunto quien eres realmente,no eres una humana ya que mi mascota tiene cierto repudio a estos.

Luego le miró fijamente con aquella mirada fría e inerte.

-Ellos me pertenecen,son mis fieles sirvientes,tal ves si me acompañas puedas develar el secreto que buscas,además necesitas un nuevo hospedaje y este lugar es lo suficientemente espacioso para ambos.

Este sonrió nuevamente mientras le tendía su mano derecha.

-Gustarías acompañarme esta noche y aclarar nuestras dudas,dejame invitarte a una cena tal ves.

Se quedaba observándolo fijamente a los ojos mientras se quedaba pensando en aquellas palabras que había pronunciado las cuales se referían en que ella era “ su invitada de honor” una burlesca expresión, acompañada de una sonrisa similar, era lo que predominaba en su rostro. Realmente no se creía aquello que él había dicho y mas después de que el la ataco mientras estuvieron en la ciudad.

-¿Yo, invitada de honor? ¿Te estás burlando de mi? Crees que voy a caer tan bajo, me parece que es un truco sucio tuyo-

Luego de musitar aquellas palabras, una sonora carcajada escapo de sus labios, la cual seso segundos más tarde. Aquella burlesca sonrisa, y expresión, se borraron de su rostro al notar como el extendía su mano derecha hacia ella, la cual se quedo observando por varios minutos en silencio. Se quedo pensando en todo aquello que le había dicho anteriormente, más cuando había hablado de ella como si la conociera.

La curiosidad comenzó a carcomerla de nuevo por dentro, provocando que su orgullo poco a poco fuera cediendo. Su mano quiso extenderse hacia la ajena por un momento, pero luego retrocedió, manteniéndose firme hasta que le contestara.

Este le oyó y no pudo evitar reir ante aquel comentario.

-Jaja Pues veo que no eres tan fácil de convencer eso me agrada pero no tengo trucos que ocultar,además suelo obtener lo que quiero de una forma u otra,solo es una pequeña invitación.

Vió como le carcomía la curiosidad y sonrió nuevamente.

-Te doy mi palabra como dueño de esta casa y como dueño de estas criaturas que puedes confiar en mi si quieres una prueba la tendrás.

Este extendió su mano y esta ves se puso serio.

-Hay mucho de lo que debemos conversar,desde la primera ves que nos vimos te he puesto a prueba,aunque confieso que la primera ves tube intenciones de matarte,he visto tu interior,tus ojos no son los de un simple humano y tu técnica me demostró lo suficiente,verás nada es lo que parece ser a simple vista.

Entonces aquellos ojos celestes cambiaron a un tono rojizo y aquella oscuridad se intensificó.

-Esta es una demostración tómalo como una prueba de mis palabras,verás quien soy realmente.

Luego usó aquella oscuridad en busca de invocar a unos espectros.

-La Verdad se revela ante tus ojos como lo prometí aquella ves es hora de revelar el secreto que tanto deseas conocer soy Hijo del Rey de los Demonios y de la Diosa de la Soledad,se podría decir que soy el nuevo regente del Inframundo quien tomó el lugar que merecía por años.

Este sonrió fríamente.

-Ahora ves porque conosco tanto a quien deseo tener a mi lado,tu tienes la posibilidad de pertener a un nuevo mundo e incluso de tener todo lo que desees.

Su mano, la cual se había querido extender hacia unos momentos hacia él, cayó bajo su propio peso hacia su costado correspondiente. Su rostro reflejaba seriedad, frialdad y una leve confusión ante sus palabras. Se había sorprendido un poco al saber que él era hijo del Rey de los demonios, eso le daba un estatus alto, sobre todo poderes innumerables.

-Dices que siempre obtienes lo que quieres ¿no?...Entonces ¿Qué pasaría si eso que quieres mantiene su orgullo en alto y se niega a ceder ante todas aquellas propuestas?-

Se quedó aún observándole por unos instantes más y luego desvió su mirar, observando ahora de reojo a cada ser oscuro y espectral que había convocado con su propio poder, realmente el poseía grandes poderes haciéndolo una persona fuerte y dura de vencer.

Volvió su vista a él, esperando aún respuesta alguna ante su pregunta, no sabía qué hacer ene se momento. ¿Qué pasaría con ella si hiciese el intento de escapar? Seguramente sería devorada o mínimo atrapada como presa fácil de esos espíritus que rodeaban el cuerpo del pelinegro.

Este oyó a la Joven y rió ante aquel comentario.

-Pues mantener ese orgullo en alto puede ser un precio alto para pagar,además no puedo darme el lujo de ser traicionado al igual que lo fué mi padre en el pasado,a diferencia de este soy bastante tolerante y amable,solo te he hecho una oferta depende de tí el aceptarla,puedes tener el poder de este mundo en la palma de tu mano e incluso si llegas a agradarme puedes reinar sobre este a mi lado.

Este caminó hacia aquel perro y luego le miró nuevamente.

-Además no tienes a donde ir,esta casa puede ser tuya,si te unes a mi tendrás protección al igual que libertad.

Luego movió su mano hacia aquellos espectros y usó aquella oscuridad en forma de un fuerte viento.

-Aunque si fallas me veré obligado a apagar ese hermoso brillo rojizo de tus ojos y eso no me lo podría permitir,no desperdicies tu Vida como esos miserables humanos,aunque debo confesar que ahora estan en una Vida mejor.

Este sonrió mientras veía como aquellos seres desaparecían ante su poder,como si le temieran.

-Ahora dime cual será tu respuesta

Suspiró con ligereza, parece que no tenía otra opción, ni siquiera se la daba. Cerró sus ojos por unos segundos, analizando la situación en la cual se encontraba. Realmente no sabía en si que él quería de ella, pero ahora debía averiguarlo.

-De acuerdo- Murmuró manteniendo sus ojos cerrados. De sus labios escapó otro suspiro, esta vez más pesado que el anterior, sabía que en cierto modo había algo extraño en esa propuesta, pero no sabía el qué exactamente.

Abrió sus ojos, posando su vista en el joven. Un brillo intenso se hizo presente en su iris, dándole más vida a aquel carmín de sus orbes. No se dejaría caer en ningún encanto tan fácil, simplemente cedía el paso para luego que pasará.

Este le oyó y sonrió satisfecho ante aquella respuesta y luego hizo un gesto con su mano para que aquella bestia les abriera el paso.

-Me alegra oir esa respuesta bien puedes quedarte aquí,esta casa será tu casa y podrás obtener las comodidades que desees,si necesitas algo podrás pedirselo a mis sirvientes,desde ahora ellos te pertenecen.

Aquella bestia se corrió hacia un lado dejándoles pasar y este se giró para ver a Blanc.

-Adelante y Bienvenida seas a Mi Hogar señorita Blanc.

Aquellas puertas se abrieron dándoles paso a ambos y a aquella mansión.

-Bien espero te agrade,puedes tomar la habitación que desees,mientras ordeno que preparen la cena ponte cómoda.


Este sonrió mientras veía como aquella mujer alada le cerraba el paso cuando se disponía a ir hacia aquel bar.

-Ustedes la tratarán como si fuera yo aunque no les agrade,o te atreves a cuestionar mis ordenes Hartia.

Esta le miró con aquellos ojos verdosos y negó con la cabeza.

-No mi señor pero a su hermana no le agradará oir que ha traido a una humana aquí.
Este le miró seriamente y alzó su mano hacia ella.

-Cuando desee su opinión se la pediré ahora apártate de mi camino.

Este alzó aquella oscuridad como si fuera un campo de fuerza que golpeó a aquella mujer y la hizo retroceder bruscamente contra una pared,para luego continuar su paso haciendo que sus cabellos se movieran con el impulso de aquella fuerza.

A esta le costó ponerse de pié nuevamente y le miró con miedo mientras se encaminaba a preparar la cena.

Cuando este oyó la vos de su hermana nuevamente.

-Veo que has castigado a Hartia aunque esa joven no confía en ti,aún así la traes aquí y la invitas a cenar que es lo que pasa por tu mente mi querido hermano.

Este sonrió sarcásticamente.

-Eso no tiene porque importarte mi querida hermanita,además ella vino aquí por su propia voluntad y será nuestra invitada,esa joven es una princesa y merece ser tratada con respeto asi que harás lo mismo mientras yo esté al mando,recuerdas nuestro pacto de sangre,ella ahora es parte de nosotros.

Luego este se encaminó hacia una de las habitaciones y sonrió mientras buscaba aquel amuleto que le habia dado su hermana y el cual llevaba consigo,para luego encaminarse hacia donde estaba Blanc y los demás.

Caminó con mucho cuidado hacia el interior de la propiedad del joven. Se maldecía un poco por dentro el hecho de haber aceptado la propuesta, pero ahora no quedaba más nada que hacer, no podía hacerse hacia atrás con la decisión que había tomado.

Poco a poco comenzó a entrar en la casa, vigilando sus alrededores. El joven se daba gran respeto, más aún si castigaba a aquellos que le cuestionaban, como había pasado con aquella mujer halada.

Por un momento lo perdió de vista, quedándose de pie y en silencio en la sala principal de la mansión. observaba esta detenidamente por dentro, daba miedo el aspecto que tenía, todo oscura y tétrica.

-Tsk....¿Qué pasará conmigo ahora? -Murmuró para si misma mientras esperaba a ver si el joven regresaba. Pensaba en que hacer si las cosas se colocaban un tanto feas, la verdad tenía que planear todo, por lo menos como escapar si sucediera algo realmente malo para no verse involucrada.

Alone habia ido en busca de aquel colgante que le habia dado su hermana,del cual se podía sentir un aura oscura y tétrica y ahora lo llevaba consigo,junto a aquellos ropajes que le hacian ver imponente aunque siniestro.

Este regresó para ver como aquella mujer alada preparaba lo que sería el lugar en donde se llevaría a cabo la cena,un comedor largo y amplio junto a un bar con diferentes aperitivos.

Aquella mujer se movió a gran velocidad para dejarle sentar en la cabecera de aquella mesa y este sonrió fríamente.

-Blanc debo agradecerte por aceptar mi invitación,anda sientate a mi lado,espero te agrade la cena aunque no suelo ser muy quisquilloso a la hora de cenar,aunque me agrada que cada cosa sea perfecta.

Este sonrió mientras veía como aquella mujer le acercaba una silla para que se sentara junto a este.

-Espero te agraden los camarones aunque puedes pedir lo que desees,mi casa es tu casa.

Este ahora se comportaba como todo un caballero frente a Blanc.

-Seguramente aún desconfías de mi,bien te he invitado para que seas mi aliada,una nueva regente en mi mundo aunque primeramente debemos sellar un pacto.

Luego hizo un gesto con su mano para que aquella mujer dejara las copas y los platos,al igual que la cena,este se puso de pié para servirle un trago,de un vino espumante.

-Aunque debo admitir que puede resultarte un tanto incómodo y doloroso.

Este sujetó la copa y tomó un sorbo mientras veía como aquella mujer se ponía a un lado como si hiciera guardia.

-Aceptarás la propuesta o rechazarás la oferta aunque sabes que no acepto un no como respuesta

Luego volvió a llamar a aquella mujer y sonrió aún más fríamente y de forma sádica mientras sus ojos se tornaban a un rojo carmesí.

-Un pacto de sangre,en donde ambos seremos un solo ente,tendrás protección y poder mas allá del que puedas imaginar.

Este extendió su brazo derecho hacia delante y se quitó aquel colgante de forma de amuleto y lo colocó sobre la mesa y vió como aquella mujer de largas garras y alas en forma de brazos se acercaba a este y usaba aquellas garras para abrirle una herida en su brazo en forma de un tajo del cual comenzó a brotar una sangre de un color negro rojizo.

Este sonrió mientras veía como caía sobre aquel amuleto que parecía brillar con intensidad al recibir aquella sangre fresca.

-Ahora es tu turno y como sé que no aceptarás te daré una pequeña motivación.

Este entonces dejó salir aquella oscuridad para invocar a aquellos espectros,los cuales buscaron sujetar a Blanc.

-Puedo eliminar a quien gustes tal ves a alguien que te causó dolor y sufrimiento,solo dime lo que quieras y cumpliré tu deseo.

Luego miró su brazo y sonrió Sádicamente mientras lamía aquella sangre,aquel acto era realmente repugnante pero parecía disfrutarlo,este entonces colocó su mano izquierda sobre aquel brazo y usó la oscuridad para cerrar aquella herida,la cual dejó de sangrar al poco tiempo.

-Este amuleto es especial,doblega tu poder y tambien roba energías si no puedes controlarlo,es un arma de doble filo,puede darte todo o quitartelo.

Había caminado hacia el comedor al ser guiada, observaba como la mujer alada preparaba todo para la "gran cena". Sentía cierta preocupación e incomodidad, una extraña sensación se había apoderado de su pecho y eso le indicaba que las cosas se encontraban bien del todo. Se giró de inmediato al escuchar los pasos del joven, observándole fijamente mientras se acercaba y luego tomaba asiento. Notó como acercaban un asiento más, colocandolo al lado del pelinegro en donde luego se sentó, cruzando sus piernas mientas prestaba atención a cada movimiento ajeno y a lo que este le decía.

-¿Qué no existen otros demonios en el mundo que puedan ser su aliado? ¿Por qué yo? -Todo aquello le confundía más. Se sorprendió al escuchar acerca del pacto y el poder, más cuando el se ofreció a servirle y destruir todo lo que le había hecho daño o lo que podría hacerle daño en un futuro quizás no muy lejano. Ladeo su rostro de un costado a otro, alejando ciertos pensamientos de su cabeza, luego posó su vista en la enorme mesa mientras la terminaban de acomodar.

-Un pacto ¿Eh?- Aún dudaba de las palabras ajenas, fue un acercamiento demasiado rápido como para confiar en él, además de que no era de abrirse a todo el mundo y menos seres de su propia raza o sangre. Prefería estar sola, así siempre ha estado bien. Volvió su vista hacia el joven y luego miró aquel extraño amuleto. Sus ojos se colocaron de un rojo vivo al ver como él derramaba su propia sangre sobre aquel objeto y este reaccionaba brillando ante el liquido. Todo aquello le indicaba que algo más pasaba por la mente del pelinegro.

-He aceptado quedarme sólo por el simple hecho de que sabes muchas cosas que quiero saber, más cuando sabes cosas acerca de mi y, por lo que veo, de mi pasado. ¿Por qué debería seguir aceptando tus ofertas? ¿Qué me asegura que todo esto no es una trampa, qué todo lo que dices es cierto?-

Sintió como la sujetaban de una manera brusca por lo cual se asustó por un momento, comenzando forcejear para buscar liberarse de aquel agarre inesperado. -¿Qué pretendes? Sabía que algo no iba bien en esto -Siguió forcejeando mientras le observaba con algo de rabia.

Alone le oyó y sonrió fríamente ante aquellas palabras.

-Es verdad hay muchos aunque por ese motivo te puse a prueba necesito aliados que realmente me sirvan.

Oyó como preguntaba sobre el pacto y aquello de su aceptación y sonrió nuevamente mientras se ponía de pié.

Caminó hasta ella y se paró detras de aquel asiento y le sostubo del rostro.

-No es una trampa,es verdad conosco cosas de tí porque me he encargado de vigilarte,verás como explicarte,se lo que acontece en este mundo por la información que me dan los sujetos que te mantienen atada,ellos vigilan por mí,son como mis ojos aunque no puedas verlos estan ahi.

Vió como forcejeaba con aquellos espectros y sonrió fríamente.

-No podrás soltarte solo quiero que aceptes mi oferta y en cuanto lo hagas te liberaré,además no dañaré a esa mirada tan hermosa,tan bella y tan obstinada.

Luego miró a aquella mujer y le ordenó que se acercara a esta y le hiciera lo mismo que el habia hecho anteriormente,aquella herida en el brazo para volcar la sangre sobre el amuleto que llevaba.

-No es hermoso el sufrimiento,al igual que ver el miedo reflejado en tu rostro,descuida no morirás.

Este sonrió aún más al ver como sus espectativas se cumplían,podía sentir aquel odio en la joven.

-Eres un bastardo- Siguió forcejeando estando aún más enojada. Sus ojos llegaron a brillar vivamente, tanto que parecían faroles encendidos en la noche. Siguió moviéndose con cierta brusquedad hasta que sintió como aquel corte en su piel y luego como el liquido vital brotar de la herida.

Bajó su mirar y observó como su sangre, gota a gota, caía sobre su vestido y parte de sus piernas. -No necesito hacer ningún pacto contigo ¡déjame ir ya! -gritó casi con todas sus fuerzas y luego bajó su rostro de golpe, escapando de la mano que sostenía su rostro.

Alone le oyó y sonrió sarcásticamente.

-Porque me llamas así solo busco lo mejor para tí,acaso no deseas ser más fuerte y mejorar tus técnicas.

Luego vió como se safaba de su mano y como caía aquella sangre por su vestido e inundaba el talismán haciendo que brille,entonces aquel medallón se convirtió en dos gemas de un color rojo brillante como la misma sangre que corría por esta.

-Tómalo es tuyo un regalo de mi parte,mientras lo tengas podrás tener lo que deseas,en cambio si lo rompes lamentarás el haberlo hecho.

Este entonces colocó su mano izquierda sobre aquella herida y usó su poder para sanarle y parar la hemorragia y sonrió nuevamente.

-Lamento mi falta de cortesía pero era la única forma de obtener esta hermosa gema y has ganado un aliado.

Movió su mano derecha hacia aquellos espectros y le ordenó que le soltaran.

-Puedes retirarte si lo deseas no te detendré al igual que nadie lo hará.

Este caminó hasta la silla en la que estaba antes sentado y solo se sentó en esta para mirarle como si esperase su reacción.

Mantuvo su vista posada en la gema y luego en la sangre que había manchado su vestido y parte de una e sus piernas. Llevó su dedo indice derecho hacia las gotas de sangre impregnada en su piel, regándola un poco por la misma zona hasta dibujar un círculo, luego llevó su dedo manchado de aquel color carmín a su boca, pasando su lengua por la punta del dedo.

Tomó la gema con su zurda y la encerró en su puño, elevando al tiempo su mirar para observarle desde su posición. Dejó escapar de sus labios un pesado suspiro y luego cerro sus ojos, meditando un poco lo que había sucedido.

-Tú ganas, Alone, tú ganas...-Fue lo único que murmuró antes de quedarse en silencio total, manteniendo sus ojos cerrados sin indicios de que los fuera a abrir por ahora.

Vió como esta dibujaba un círculo en su pierna con la sangre que habia manchado su vestido y como tomaba la gema que este le dió y le oyó nuevamente y sonrió satisfecho mientras le veía como esta mantenía sus ojos cerrados.

-Siempre gano de una forma u otra estimada Blanc bien porque no terminar esta cena y después si gustas puedes quedarte a dormir o irte,tu pones las reglas ahora.

Este levantó aquella copa y sonrió.

-Brindemos por esta alianza entonces.

Elevó un poco su rostro y luego abrió sus ojos, una sonrisa de malicia se esbozó en sus labios mientras extendía su diestra hacia la copa de vino, tomándola con delicadeza para luego elevarla y brindar

-Por...nuestra alianza- Su sonrisa se amplió más, ya tenía varias cosas en mente y obtener mucho poder no sonaba tan mal.

Este entonces entrechocó su copa con la de Blanc para brindar por aquella alianza y esbozó una sonrisa de satisfacción al hacerlo,después de todo no eran tan diferentes como pensaban.

-Sabes Blanc tu y yo nos parecemos mucho además de que ambos tenemos un mismo fin en mente y somos de la misma raza,algo me dice que esta unión será satisfactoria,además pondré a tu disposición a mis sirvientes si algo deseas ellos de ahora en adelante acatarán tu voluntad.

Luego se dispuso a cenar mientras le miraba con aquellos ojos rojizos.

-Lamento el haber ensuciado tu vestido,podría mandar a alguien por uno nuevo,el que desees lo tendrás y dime porque has uido de tus responsabilidades.

Este entonces se colocó aquel collar en su cuello mientras aguardaba la respuesta de la joven

Se nota que sabes mucho... - Le observó un tanto sorprendida ante la pregunta. Se dispuso a comer mientras esperaba la respuesta del joven, no le dejaba de observar en ningún momento. Había colocado la gema sobre la mesa, dejándola a un lado para poder comer con tranquilidad.

-Lo del vestido no importa, es lo de menos...además combina con mis ojos.- Murmuró con cierto tono burlón mientras disfrutaba de la exquisita cena. Le encantaban los camarones, no podía negarlo, era como un pecado para ella si lo negaba.

-Respondiendo a tu pregunta, quise alejarme de mis responsabilidades y tomarme un gran descanso, claro está sin pedir permiso alguno.-

Este le oyó y sonrió afirmando con la cabeza.

-Solo se lo justo y lo necesario aunque tu también podrás saber más sobre mí,te dejaré preguntarme lo que quieras.

Luego le oyó hablar del vestido y no pudo evitar reirse ante aquel comentario.

-Es cierto una convinación exquisita,si pudiera te retractaría en un dibujo aunque estos pueden llevarte al borde del otro mundo.
Parecería que ambos compartían aquella aficción por los camarones.

-Parece ser que compartimos una misma aficción por la cena me gustan los camarones,su sabor se diferencia del resto de los mariscos aunque bueno no soy un pretencioso para la comida.


Este sonrió ante aquel comentario de su uída de sus responsabilidades.

-Menos mal que mi hermana no esta meroreando por el lugar si oyera esas palabras me regañaría aunque un descanso no vendría mal si tienes tus metas hechas.